Mis proyectos

Dos libros 2020-2025

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Dos libros 2020-2025

Mis libros, un gesto de corazón, accesibles a todos gracias a LSF y a un código
QR

Mis libros, un gesto del corazón, accesible a todos gracias a LSF y a un código QR

Un silencio entre dos mundos:

Desde mi infancia hasta el confinamiento de Covid-19, atesoré mis recuerdos gracias a los objetos guardados en mi caja secreta, oculta bajo mi cama. Estos pequeños tesoros me han ayudado a reconstruir fragmentos de mi vida, con la esperanza de que algún día escriba un libro sobre ellos. Un libro para contar, para transmitir, para existir.

Personalmente, lo he intentado todo: buscar una película, un libro o cualquier otro medio que pudiera ayudarme a transmitir un mensaje a mis padres, y especialmente a mi hermano. Siempre he tenido el profundo deseo de que descubrieran la riqueza de la cultura sorda, nuestra identidad, nuestra comunidad. Pero el verdadero obstáculo era que nunca pude establecer una comunicación real con ellos en LSF. Siempre se negaron a aprenderlo, prefiriendo sólo el habla. Esta negativa era un muro entre nuestros mundos.

Un día, quise enseñarles una película. Me temblaba un poco el dedo al señalar la pantalla, que mostraba Tierra de sordos. Esta película cuenta la vida cotidiana de los sordos, su vida en la escuela en 1993. Vi una parte de mí en ella.

Al final, mi madre se limitó a decir: “Bueno, es bueno que los niños sepan hablar… Tú también hablas bien”. Pero ella no vio nada de lo que yo estaba pasando. Nada de mi sufrimiento en la escuela especial. Aquel día me di cuenta de que el mensaje no llegaba. Fue un momento perdido. Y eso me marcó.

El 31 de diciembre de 2014 murió mi madre. Al año siguiente, en 2015, salió el DVD de La Famille Bélier. Llena de esperanza, se lo enseñé a mi hermano. Esperaba que algo encajara, una palabra, una apertura. Se limitó a sonreír y decir: “Qué gracioso”.

Y permanecí en silencio. Con, una vez más, lo que no podía decir. Al final, lo comprendí todo.

Muchas películas hablan de la sordera, pero muy pocas muestran la realidad invisible: el verdadero problema de la comunicación en LSF, la falta de comprensión en el seno de las familias, el silencio que no se ve pero que se siente. Estas películas, por muy bienintencionadas que sean, no sensibilizan realmente. No proporcionan ese choque necesario, ese momento de verdad que haría decir a la gente que oye:

“¿Y si fuera yo? ¿Y si no pudiera hablar con mi propio hijo?”

Por supuesto, hay libros escritos por personas sordas. Son esenciales, cuentan la verdadera historia. Pero muchos miembros de la comunidad sorda no siempre se sienten cómodos leyendo. Algunos libros son complejos y no siempre accesibles. Y al final, estos libros no reparan los lazos familiares rotos, ni los profundos silencios entre seres queridos.

Y eso me entristece mucho. Ver a las personas sordas viviendo con sus silencios, sus dolores no expresados y esta soledad que no siempre adivinamos.

Una llave dorada, un clic silencioso:

Incluso antes del encierro, un momento tuvo un profundo efecto en mí.

En 2016, era profesora de LSF en una escuela especial para niños sordos. Un día, un niño de 5 años me entregó un objeto: una llave dorada con la palabra “SOS” escrita en ella.

Sólo ese gesto me conmovió. Esa llave… nunca la he olvidado. Abrió un torrente de emociones. Me llevó a mi propio pasado, a las heridas de mi infancia. Me hizo darme cuenta de que los niños sordos de hoy en día siguen experimentando cosas que nosotros hemos vivido, sin tener siempre las palabras para decirlo.

Fue entonces cuando la idea de escribir un libro se hizo evidente. Durante tres años, escribí. Lentamente. Con el corazón. Pero durante los tres primeros meses, no pude poner nada por escrito. Demasiadas emociones. Demasiado dolor. Necesitaba distancia, silencio, atención. Entonces, un día, llegaron las palabras. Y a través de ellas, volví a encontrar mi voz.

Un proyecto desde el corazón, para la comunidad :

Al tomar conciencia de la crisis económica y de la reducción de las subvenciones, me di cuenta de que sería difícil hacer accesible este libro en LSF, con códigos QR que llevaran a vídeos firmados.

Y las editoriales tradicionales no siempre están dispuestas a acoger este tipo de proyectos. Hay que esperar, negociar y, a menudo, adaptarse a formatos que no respetan la riqueza de la cultura sorda.

Pero no podía sentarme a mirar. No podía ver cómo los niños sordos, los adolescentes sordos y los adultos sordos pasaban por los mismos obstáculos que yo.

Así que decidí pasar a la acción. Yo misma financié la autopublicación de este libro, con una versión mejorada con códigos QR accesibles en LSF.

Mi objetivo es simplemente ayudar a los sordos, ofrecerles un libro en su lengua, que puedan comprender, experimentar y compartir con sus seres queridos, sus familias, sus compañeros…

Es mi gesto de amor, mi compromiso, mi regalo al público sordo.

Colaboración valiosa y comprometida:

De todo corazón, me gustaría darte las gracias por haber aceptado trabajar conmigo en este proyecto durante dos años. Ha sido un trabajo magnífico y de la máxima calidad. Me quito el sombrero ante ti.

Me gustaría nombrar a dos personas sordas positivas y fiables que han desempeñado un papel importante en esta aventura:

  • Vivien Fontvieille (traductora de LSF)
  • Michel González

No dudes en descubrirlos en sus sitios web.

Vivien Fontvieille
Vivien Fontvieille
Michel González
Michel González